jueves, 25 de abril de 2013

El crucigrama.



Era uno de sus muchos placeres inconfesables: resolver crucigramas sentado en el trono de Roca, acompañándose de un bocadillo pantagruélico de anchoas en aceite con tomate o de tortilla de patatas con mahonesa, mientras dejaba caer gotas de aceite y de su sudor o trozos de tortilla que se le escapaban de la boca sobre sus elefantiacas piernas.
Para la obesidad mórbida de Rogelio, que andaba por los ciento veinte kilos, la taza del retrete era diminuta, pero él se apañaba bien, e incluso había días que se sentía inspirado y culminaba la sesión con una pajilla.

"Morir, terminarse algo", ni puta idea!
Se le estaba atascando el crucigrama. Ya tenía casi acabado el bocadillo y había concluído el vaciado de su cuerpo, pero le quedaban muchos cuadritos del crucigrama sin rellenar.
"Morir, terminarse algo"
Esta era una horizontal. Echó de nuevo un vistazo a las verticales: "Hierba forrajera de los prados que se utiliza para alimentar al ganado" Como ya tenía las dos última letras, NO, le fue fácil dar con la palabra: HENO.
"Yupi!, ya cuento con una N para "morir, terminarse algo"
Miró otra vertical: "Caja para guardar dinero o cosas de valor" Tenía la primera letra, la C.
"Guau, qué potra, ya está, COFRE!
Así que ahora contaba con la F que daba principio a "morirse, terminarse algo" Contaba con la F inicial y con NE.
"Bieeeen, ya lo tengo, FENECER!!... Fenecer, fenecer, fenecer...!!, Ja, ja, ja!!
Y de pronto le llegó el temido infarto, un infarto que le dejó sentado en el trono hasta tres días más tarde, cuando sus familiares decidieron entrar en la casa porque ya se barruntaban lo peor.
Rogelio feneció con el infinitivo fenecer en la boca, después de muchos años de desoír las advertencias de los médicos en lo referente a su salud.

4 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Va a ser esto, morir con gusto, en vez de amargado con el sempiterno "No bebas. No comas. No...".

      Triste anécdota la de mi madrina, siempre amargando a mi tío con la vida sana, prohibíendole fumar, comer lo que le gustaba y tomar unas copas. Al final se fue ella de un día para otro por un cáncer no diagnósticado. Su viudo sigue aquí, tomándo lo que le apetece y mirando la tele.

      ¡Buen día! Ayer llovió a cántaros y volvi hecha una sopa. Hoy tiene el mismo aspecto pero todavía no ha descargado. Seguro que lo hace cuando tenga que salir a reunirme con mi hijo por una "excursión" de esas...

      Tome el ascensor, ayer le dije algo en Manhattan.

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  2. Hola!
    Estoy cinco minutos más, en el ciber del barrio, y dentro de un rato iré a la biblioteca de la city y pondré lo que falta de la anécdota de los desnudos en La Comunidad.
    Ya he visto en el periódico, todo el este penínsular lloviendo (incluída Murcia!) y un sol radiante en el norte.
    La salud es importante pero la genética juega un papel importantísimo. Los hay que no se cuidan y viven muchos años en plena forma. De todas formas no digo si el amigo Rogelio es joven o viejo.
    Buen día!

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