sábado, 27 de abril de 2013

Díficil de entender




La mayoría de la gente pretendía mostrarse feliz, estúpidamente feliz!... Todos tenían expresiones de idiotas y hacían continuas idioteces, a cada cual más espectacularmente idiota; gritaban tonterías, reían como locos de atar, mostraban sus dientes amarillentos o vomitaban en medio de aquel recinto de locos.
El tren no llevaba a ninguna parte, daba vueltas sin sentido, entrando y saliendo una y otra vez en el mismo tunel.
Jamás vio tantos borrachos juntos, tantos niños babeando, tantas mujeres pintarrajeadas como furcias, tantos adolescentes mongoloides...
Aquella rueda gigante se elevaba al cielo pero no llevaba a ninguna parte, era algo tan absurdo como el tren que daba vueltas por un tunel circular. Y por qué los viajeros del tren absurdo se mostraban tan histéricos ante aquel individuo disfrazado de espantajo que simulaba pegarles escobazos?... Y para qué mierda servían aquellos automóviles pequeñitos que chocaban una y otra vez y en los cuales la gente también se reía como si estuviesen drogados o idiotizados?... Qué placer o felicidad demencial les procuraban aquellos espejos que distorsionaban grotescamente sus imágenes?... Qué sentido tenía gastarse el dinero en viajar en máquinas espantosas que les agitaban convulsivamente muy por encima de tierra firme hasta hacerles sentirse aterrorizados?... Qué mensaje diabólico trataba de transmitir aquel individuo repelente cuya voz amplificada repetía una y otra vez no sé qué gilipollez acerca de un "perrito piloto" y una "muñeca chochona"?... Por qué cargaban aquellos adultos patéticos con osos grandes de peluche?... Qué razón había para tanta locura de sirenas, luces destelleantes giratorias, ingesta desaforada de alcohol y comida basura, peleas de jóvenes o viejos, niños extraviados, vidrios rotos, nubes de humo de tabaco, olor a frituras y a vinos, robos de bolsos y carteras, suciedad, imbecilidad, ridiculez...?
Decididamente, no entendía nada, pero nada de nada. El no era de este mundo.




4 comentarios:

  1. Las ferias son un invento americano, como la Cocacola...no podría ser de otro modo.

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  2. Je je je... El que se dice no ser de ese mundo, conoce las ferias tan bien como todos ;D

    Es cierto que no me atraen mucho, pero he ido innumerables veces por hacerlo con la familia o con amigos.
    Prefiero las veces que he llevado a mis hijos y a los alumnos del cole (a Port Aventura), ahí no han habido vómitos ni excesos, nos lo pasábamos muy bien bajando por el Cañón en balsas, entrando en el Templo de Fuego, viendo los bailes de nativos, y atacándonos con globos de agua lánzados desde enormes tirachinas entre mucho más, a cual más divertido.
    Pero sí que normalmente, ciertas ferias, esas del relato, son tal como lo cuenta. La Feria de Abril sobretodo. Los borrachos son cantidad y hay que ir con mucho cuidado. Mucho.

    Abajo le cuento el coñazo de mi ex suegro con su paquete de Ducados ;D

    Hasta el lunes.

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  3. Vengo de comentar en el post de abajo.
    "Cada uno cuenta la feria como le va", je, je!... Desde luego, en mi entrada doy una visión tendenciosa, pero lo cierto es que hay de todo, y no todo el mundo está borracho. Yo estuve en un parque de atracciones de aquí, en Blackpool, y la gente se comporta de manera más educada que en España, no hay tanto gamberro suelto ni borrachines por todas las esquinas, aunque en este país beben como cosacos, todo hay que decirlo.
    Felices ferias y fiestas!

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  4. No creo que las ferias sean un invento americano, Don Jesús, en Europa y en los paises musulmanes las ha habido desde siempre, con su mercadeo de todo tipo, sus juglares, etc.

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