viernes, 1 de marzo de 2013

Un final



Se sintió deprimido y sus compañeros lo notaron enseguida, así que se distanciaron un poco para no molestarle, es lo que hacían siempre en estos casos. Sin embargo, esta vez, más que una depresión era algo muy fuerte,  mucho más fuerte, presentía que iba a suceder una tragedia muy grande, quizá la mayor tragedia que hubiese presenciado en su vida.

A medida que se acercaba el fatídico momento, el miedo se iba apoderando de él. Carecía de inteligencia, pero la Naturaleza le había dotado del don de la percepción extrasensorial, al contrario que a sus congéneres.

El viejo dinosaurio presintió que el fin era inminente. Miró al cielo y vio descender a la gigantesca roca procedente del infinito. La vio en una fracción de segundo.

Sucedió hace 65 millones de años y fue el final de los grandes saurios. Fue un final más en un universo de principios y finales.

2 comentarios:

  1. El Universo está plagado de principios y finales. Ahora mismo, dicen los astrónomos que están asistiendo al nacimiento de un nuevo planeta. Millones y millones de años así y nosotros, como los dinosaurios, sólo somos un puñado de polvo en esta inmensidad.
    Desaparecieron civilizaciones enteras, igual que desaparecerá la nuestra cuando menos lo esperemos. Siento curiosidad por saber cómo nos veran las del futuro, si sabrán de la corrupción y decadencia o creerán que fuimos superinteligentes, je je je...

    Buen fin de semana.

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  2. O si no nos verán, al igual que nosotros quizá no sepamos nada de otras civilizaciones que hayan existido en el planeta. El Universo es la Gran Incognita y nosotros no somos nada, tiene usted toda la razón.
    Feliz viaje por la vida en este fin de semana!

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